La mayoría de los conductores no la ven, no la tocan, no piensan en ella.
Y sin embargo, cuando falla… lo cambia todo.
Silenciosa, precisa, vital. La correa de distribución es uno de esos elementos que separan el buen funcionamiento de un motor… del desastre absoluto.

En Granasan, nuestro taller mecánico en Granada, lo sabemos bien.
No es una exageración. Es experiencia.
Una correa mal cuidada puede convertir un motor entero en chatarra funcional en cuestión de segundos.

Y no hay marcha atrás.

 ¿Qué es la correa de distribución? Más que una simple tira de goma reforzada.

La mayoría de la gente piensa que es “una correa más”.
Pero no. No lo es.
Es el reloj maestro del motor. El elemento que sincroniza los movimientos del cigüeñal y el árbol de levas, que se asegura de que las válvulas se abran y se cierren en el momento justo, ni un milisegundo antes ni después. Si eso se pierde, el motor colapsa.

Porque el motor es una coreografía.
Y sin esa sincronía, el caos mecánico es instantáneo.

Y en muchos vehículos, esa misma correa también acciona la bomba de agua, o incluso más componentes. Una sola avería… puede arrastrarlo todo.

 ¿Cuándo se cambia? ¿Cómo saber si ya estás en la zona de riesgo?

Aquí no vale improvisar.
No esperes a que se rompa. No esperes señales. Porque a veces no las hay.
El cambio de la correa de distribución es mantenimiento preventivo puro y duro. Como quien se cambia las zapatillas antes de que se rompan en plena carrera.

Por regla general: entre 60.000 y 100.000 km, o cada 5 a 7 años, lo que ocurra primero.
Pero eso no es exacto para todos los modelos.
Lo que vale para un diésel de 2.0L, no vale para un gasolina urbano. Y lo que sirve para alguien que solo conduce por autovía, no aplica a quien hace trayectos cortos a diario.
Por eso en Granasan no adivinamos: revisamos el libro del fabricante, analizamos el desgaste real, y decidimos con criterio técnico.

 ¿Hay señales antes de que falle?

A veces sí. A veces no.
Y esa es la trampa.

Puedes notar un zumbido. Un chirrido sutil.
Una vibración rara al arrancar.
Un pequeño desajuste en el ralentí.
O directamente, nada… hasta que el coche se apaga de golpe. Y cuando lo intentas encender, el motor gira libre… pero no arranca. Porque la sincronización ya se perdió.
Y ahí no hay reinicio. Solo reconstrucción.

 En Granasan, no jugamos con la mecánica crítica

Cuando vienes a nuestro taller, no nos limitamos a cambiar el kit de distribución porque sí.
Primero evaluamos. Diagnosticamos. Y si es viable reparar, reparamos.
Porque no todos los casos requieren el mismo tratamiento. Y porque a veces, una intervención técnica bien ejecutada puede devolverle la vida útil al sistema sin necesidad de sustituirlo por completo.

Dicho esto, cuando el estado de desgaste o el kilometraje lo exigen, realizamos el cambio completo del kit de distribución: correa, tensores, poleas, y si corresponde, la bomba de agua.
¿Por qué? Porque estos componentes trabajan en conjunto.
Y si uno falla, compromete el rendimiento y la seguridad de todos los demás.

Un tensor fatigado puede arruinar una correa recién puesta.
Una polea dañada puede desgastarla antes de tiempo.
Una bomba de agua con juego o pérdida puede provocar un sobrecalentamiento grave.

Por eso en Granasan no improvisamos, no parcheamos por inercia, y no sobreintervenimos sin motivo: evaluamos y actuamos con criterio mecánico real. Reparamos cuando es posible. Renovamos cuando es necesario.

¿Por qué confiar en nosotros?

Porque no improvisamos.
Porque sabemos lo que hacemos.
Porque cada motor que entra en nuestro taller lo tratamos como si fuese nuestro.
Porque no usamos piezas de baja calidad.
Porque explicamos todo antes de tocar nada.
Y porque, después de más de una década trabajando con todo tipo de motores, sabemos que un coche bien mantenido es un coche que cuida de ti.

 No dejes que el tiempo o el kilometraje te jueguen una mala pasada

Si estás en Granada y no sabes cuándo fue el último cambio de la correa, o si estás cerca del intervalo recomendado, no lo dudes. Ven a vernos. Te lo revisamos. Te lo explicamos. Sin compromiso.

En Granasan, tu taller mecánico en Granada, estamos para prevenir, no para lamentar.